TREBEAK DE ESKUBELTZ ESKAUT TALDEA DE CAMPO DE TRABAJO EN MARRUECOS

La rama de trebeak de  Eskubeltz Eskaut Taldea pasarán el mes de julio organizando y colaborando en varios proyectos de integración social 25 jóvenes eskaut de entre 17 y 18 años partirán este verano a Alhucemas (Marruecos) para colaborar en diferentes proyectos de intervención social. Todos ellos pertenecen al grupo Eskubeltz Eskaut Taldea de Getxo, que lleva preparando este campo de trabajo desde comienzos de año.

Durante el mes de julio, realizarán diferentes actividades. Por un lado, organizarán colonias urbanas para niños y niñas de la zona y, por otro lado, ayudarán al

personal del centro de personas con diversidad funcional Dar Assalam de la Fundación Cruz Blanca. Además, colaborarán en dos proyectos de la comunidad

trinitaria de allí: uno dedicado a la acogida de migrantes en tránsito y otro enfocado hacia la integración social de mujeres marroquíes.

Los y las adolescentes que participarán en esta iniciativa ya han colaborado con otros voluntariados en el ámbito más local anteriormente. A comienzos de este

curso cada uno de ellos escogió una asociación del municipio y ha estado trabajando con ella desde entonces. Entre ellas, estaba San Nikolas Zabalik, una

asociación de Getxo dirigida a la integración del colectivo migrante. Esta experiencia les ha permitido conocer a personas procedentes del Magreb y recibir sus

testimonios.

El coordinador de Eskubeltz, Guillermo Sabas, valora este proyecto como “muy importante” para el grupo. “Este campo de trabajo impulsado por nuestro grupo

supone salir de nuestro ámbito de actuación habitual y ayudar a otros colectivos en un país muy diferente”, explica Sabas. “Sabemos que estas experiencias son

impactantes para cualquier persona, pero tenemos claro que a partir de ellas somos más conscientes de nuestra fortuna viviendo aquí”.

 

Nora Gallastegi es una de las jóvenes que partirá al norte de Marruecos: “Este proyecto ha sido una carrera de fondo en la que hemos tenido que trabajar muy

duro. Desde obtener los fondos económicos necesarios para llevarlo a cabo, hasta la programación de todas las actividades”. Además, todos sus compañeros y ella

reconocen que las situaciones que vivirán allí les marcarán para toda la vida. “Las  personas responsables de estos proyectos ya nos han avisado de que esta

experiencia nos puede transformar como personas”, sentencia.

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